“Sí logras entrar en la mente de un asesino puedes predecir y en consecuencia evitar, su siguiente crimen”
Robet K. Ressler.
No hay nada más difícil que dar caza a un cazador de hombres. Los encargados de ello son los profilero perfiladores criminales. A través del cine el mundo ha observado sorprendido y atónito quien es y que hace un perfilador criminal. ¿Quién no recuerda a Clarice Starling y a Jack Craford tras los pasos del brutal asesino en serie, apodado por el propio FBI como “Buffalo Bill? A principios de la década de los noventa, los espectadores contuvieron la respiración al ver por primera vez la fría y siniestra mirada del Dr. Hannibal Lecter, encerrado en una celda de un sanatorio mental bajo tierra en la película “El silencio de los corderos” (1991, Jonathan Demme) basada en la obra de Thomas Harris. El Doctor Lecter, psiquiatra, es un atípico psicópata con una inteligencia superior a la media y una gran sensibilidad por las Bellas Artes, que aconseja a los agentes del FBI (para alimento de su ego) como atrapar a Buffalo Bill, dándoles pistas para que hagan un perfil criminal y lo encuentren. Fue a partir de esta película, cuando el mundo descubrió a los fríos e inteligentes asesinos en serie psicópatas y a su alter ego: los perfiladores que les dan caza.
El perfil criminológico o perfil criminal (profiling) es una técnica de investigación que trata de descubrir, explicar y predecir las características socio-demográficas, criminológicas y psicológicas del sujeto que ha cometido un delito y del cual se desconoce su identidad. Con esta finalidad, se estudia la escena del crimen en la cual quedan reflejadas las huellas de comportamiento del criminal, a la víctima, a los posibles testigos y toda la documentación relativa a los hechos. Se trata de una herramienta de ayuda a la investigación policial para delimitar las características del presunto asesino, creando un patrón utilizando el razonamiento analítico y lógico. Robert K. Ressler define la perfilación criminal como “la elaboración de un mapa de la mente del asesino” y determina que si se consigue entrar en la mente de un criminal, se puede entender e incluso predecir su próximo asesinato. Vicente Garrido (2006) determina que el perfil criminológico es una estimación acerca de las características biográficas y del estilo de vida del responsable de una serie de crímenes graves y que aún no se ha identificado. Para los perfiladores lo que el asesino deja en la escena del crimen son sus decisiones, sus actos. Nos deja un mensaje, nos narra una historia, ya que la huella psicológica del victimario queda plasmada en el asesinato que ha cometido.
Dicha técnica es aplicable sobre todo en los casos de asesinos en serie ya que la repetición es lo que permite determinar si existe una pauta, especialmente en los delitos de violación, homicidio, asesinato y piromanía ya que los datos que se obtienen de la escena del crimen y de las distintas víctimas permiten obtener información de gran calidad y muy útil sobre el delincuente desconocido que deben atrapar.
OBJETIVOS DE UN PERFIL CRIMINOLOGICO:
– Establecer las características psicológicas y sociales más probables del asesino.
– Identificación del presunto autor y eliminación de sospechosos.
– Vinculación de diferentes crímenes con un mismo autor (linkcage).
– Crear estrategias e información relevante en los interrogatorios de los sospechosos.
– Colaborar en la pauta a seguir con los medios de comunicación.
– Establecer las características psicológicas del presunto asesino, su relación con el delito y con las víctimas.
– Aportar pruebas su imputabilidad, peligrosidad y riesgo de incidencia.
Dentro de la investigación criminal hay tres maneras diferentes de elaborar los perfiles:
1.- PERFIL CRIMINAL DE AGRESORES CONOCIDOS O METODO INDUCTIVO: traza el perfil del delincuente desconocido a partir de características conductuales y demográficas que son compartidas por otros criminales que ya han sido estudiados en el pasado y que encajan en el patrón de conducta del sujeto desconocido que están buscando. Consiste en caracterizar a los agresores conocidos o población criminal encarcelada para extraer características generales (de lo particular de cada sujeto a lo general). Si por ejemplo se está realizando un perfil sobre agresores sexuales dentro de la prisión, se irá entrevistando a estos sujetos y si se repite el patrón podrán extraerse determinadas características de los agresores sexuales, por ejemplo su falta de asertividad. Para obtener estos datos los investigadores realizan entrevistas a delincuentes sentenciados por el mismo delito (asesinatos, agresiones sexuales). También se basan en la observación conductual, en los informes obtenidos de testigos, víctimas, del personal penitenciario a su cargo y de todos los datos del expediente judicial del asesino o agresor. En base a todas estas fuente se construye el perfil inductivo. Robert Ressler dentro del proyecto de la Personalidad Criminal (PIPC) entrevistó a cientos de criminales violentos de todas las cárceles de EEUU, como Jhon Wayne Gacy, Ted Bundy o Jeffrey Dahmer. La finalidad de entrevistas es comprender y predecir las acciones de un asesino en serie.
2.- PERFIL CRIMINAL DE AGRESORES DESCONOCIDOS. PERFIL PSICOLOGICO O METODO DEDUCTIVO (FBI): este método también se conoce como “análisis de la evidencia del comportamiento” y se basa en el análisis de la evidencia psicológica de la escena del crimen. Es un método de investigación de patrones de comportamiento de un delincuente en particular sin tener en cuenta lo que hacen el resto de delincuentes o agresores (va de lo general a lo particular, es decir edad del asesino, raza, nivel académico, impulsividad, etc.). Se traza el perfil a partir del análisis exhaustivo de la escena del crimen, toman fotografías, estudian los informes de la autopsia, estudian a la víctima y partiendo de determinados patrones de conducta deducen las características del asesino o del agresor, sus emociones y sus motivaciones (Turvey, 1999).
El 23 de enero de 1978 en la ciudad de Sacramento, David Walling halló a su esposa de 22 años asesinada de un modo terrible y muy cruel en su habitación. Aparte de las terribles heridas que tenia, se encontró un envase de yogurt que se había utilizado para beber la sangre de la víctima. Robert Ressler junto a su compañero Russ Vorpagel, elaboraron el siguiente perfil:
“Varón blanco, entre 25 y 27 años de edad, delgado, con apariencia de estar desnutrido. Su casa estará extremadamente sucia y descuidada, y se podrá hallar en ella evidencia del crimen. El asesino tiene un historial de enfermedad mental y abuso de drogas. Será un solitario, sin amigos mujeres o varones, y vivirá solo en casa (quizás a excepción de sus padres, pero es improbable). Sin empleo. Posiblemente recibirá algún tipo de subsidio por enfermedad. No ha estado en el ejercito. Habrá dejado el bachillerato o la facultad sin concluir los estudios. Posiblemente sufre una o varias formas de psicosis paranoide”.
El perfil fue muy preciso. El asesino era Robert Chase, el “Vampiro de Sacramento”.
Tras el juicio Robert Ressler visitó a Chase en el corredor de la muerte en San Quintín en 1979. La entrevista que Ressler hizo a Chase está recogida en su libro Asesinos en serie.
3.- EL PERFIL GEOGRAFICO: podría denominarse perfil de la escena del crimen ya que trata de relacionar el lugar de la escena del crimen (descampados, sitios solitarios, parques) con el lugar de residencia del autor, basándose en la idea de que los agresores actúan en un lugar y momento que tienen para ellos un significado personal. Se trata de un perfil primordialmente empírico y utiliza el concepto de mapa mental (todos tenemos un mapa en la cabeza de las rutas y caminos que recorremos habitualmente) tratando de reconstruir la representación psicológica de las escenas del crimen donde el asesino se encuentra cómodo y seguro (Homant, 1998). El perfil geográfico contesta a preguntas como ¿Dónde seleccionará a su próxima víctima? ¿De qué modo se mueve o desplaza el asesino? Vicente Garrido (2006) determina que incluso se puede deducir el tipo de trabajo que tiene si estudiamos los lugares y horas en las que se cometen los asesinatos, ya que alguien con un horario y un lugar de trabajo estable es muy difícil que pueda atacar en lugares diferentes y a diferentes horas.
El psicólogo británico David Canter desarrolló la hipótesis del círculo. Parte del hecho de que los lugares donde se han cometidos los crímenes o los asesinatos están relacionados con el domicilio habitual del criminal o con algún otro lugar importante para él, como puede ser su lugar de trabajo. Consiste en marcar sobre un mapa todos los asesinatos cometidos por el mismo sujeto. A continuación trazamos una línea recta que una los dos puntos más alejados correspondientes a una serie de delitos supuestamente cometidos por el mismo autor, y dibujamos una circunferencia tomando dicha recta como diámetro. La hipótesis del círculo dice que la vivienda del autor de los hechos delictivos estará dentro del círculo posiblemente cerca del centro, ya que de acuerdo con los datos obtenidos por Canter, el 80% de los violadores seriales viven en ese círculo.
BIBLIOGRAFIA:
- Vaca Cortés, J; Dzib Aguilar, P. La máscara del asesino. 2012, Mérida (Yucatán). Ediciones de la Universidad Autónoma de Yucatán. Pp. 109-114.
- Garrido Genoves, V; López Lucio, P. El rastro del asesino. El perfil psicológico de los criminales en la investigación policial. 2014, Barcelona. Editorial Planeta S.A. Pp. 32 y 33.
- http://www.apa.org/monitor/julaug04/criminal.aspx
excelente