Hay personas que no se tienen que esforzar para ganarse nuestra confianza, debido a la posición que ocupan en la sociedad: un cirujano, un abogado, un asesor de inversiones, un político o un ejecutivo de banca. Algunos de ellos utilizan su profesión y su situación privilegiada como medio para satisfacer sus necesidades personales. Hablamos de los psicópatas funcionales o integrados, aquellos hombres y mujeres que llegan a la cima sin usar la violencia y que suelen ser un peligro invisible.
Podéis leer el artículo completo en el siguiente enlace, publicado en la Revista del Colegio General del Notariado.
Excelente página.